Con humildad y confianza invoquemos al Señor a favor de nuestro hermano N. – Dígnate visitarlo con tu misericordia y confortarlo con la santa Unción. Dios todopoderoso tenga clemencia de nosotros, perdone nuestros pecados y nos lleve a la vida eterna. Pongamos, ya que, a nuestro hermano enfermo a cargo de Cristo, que lo ama y puede curarlo, a fin de que le conceda alivio y salud. Como capellán de un hospicio, tengo la oportunidad única de comunicar experiencias muy significativas con los pacientes. Mi función principal es percibir la narración de la vida de un tolerante y emprender la espiritualidad y la fe tal y como las acoge la persona a la que atiendo.
Agarrado de su mano, había ido frecuentemente a la Pascua de Jerusalén… Habían hablado en tantas ocasiones en aquellos años de Nazaret, que el uno conocía todas y cada una de las intimidades del otro. Era la existencia de una mujer, ya viuda desde hacía años, según lo realiza meditar todo. Pero el otro malhechor se sintió impresionado al notar de qué forma era Jesús. Lo había visto lleno de una paz, que no era de este planeta. La sangre de los tres formaban un mismo charco, pero, como afirma San Agustín, si bien para los tres la pena era la misma, sin embargo, cada uno de ellos moría por una causa distinta. La raza humana entera, representada por los personajes allí presentes, se ensaña contra El.
La Palabra El Día De Hoy: Isaías 58,7-Diez; Salmo 111; 1 Corintios 2, 1-5; Mateo 5,13-16
Tras recibir el mensaje con el nombre del moribundo a través del correo electrónico hay que responder AMÉN. Esta respuesta significa la confirmación de recibir la información y rezar una vez la Coronilla de la Divina Misericordia en la intención del moribundo. Almacenar mi nombre, e-mail y página web en este navegador para la próxima vez que haga un comentario. Hay que vivir con la alegre noticia de que Dios es el Padre que protege de nosotros.
Danos la fuerza, Padre, para afrontar lo que tú decidas. Hago esta oración para este hermano enfermo terminal a fin de que tengas clemencia de su historia. Queridos amigos, imagino que esta semana vais a ser pocos los que tengáis tiempo de pararos a leer el blog, para los que lo hagáis me agradaría proponeros una reflexión que estoy convencido que os ayudará. Os propongo pensar acerca de las siete expresiones que Jesús dijo en el instante agónico de la cruz.
Oración De La Tarde Viernes
Cuando ellos estén afligidos, vamos a poder proporcionarles exactamente el mismo consuelo que Dios nos ha dado a nosotros. Venid a mí todos y cada uno de los que estáis cansados y sobrecargados, y yo os aliviaré. Dejad que os enseñe, por el hecho de que soy humilde y manso de corazón, y encontraréis descanso para vuestras ánimas. Por el hecho de que mi yugo es llevadero, y rápida la carga que os doy. Otros pueden percibir la muerte como el final dichoso de su historia terrenal y el comienzo de su viaje a los brazos cariñosos de nuestro Señor Dios en Su reino en el paraíso. Sin embargo, la mayor parte de nosotros nos encontramos atados a ideas seculares y enlazamos la desaparición con algo bastante desalentador.
Además, se conoce que la fe bien concebida y aplicada es una variable poderosa para sostenernos en buen estado de salud. Fe a Dios todopoderoso, que se pone a prueba en instantes de la vida que se atraviesan por obstáculos y es precisamente en esas circunstancias donde tenemos que tener más entereza y poner en las manos de Dios la situación que se atraviese. Jesús y María vivieron en la Cruz exactamente el mismo drama de muchas familias, de tantas madres e hijos, reunidos en el momento de la muerte. Después de largos períodos de separación, por razones de trabajo, de patología, por labores misioneras en la Iglesia, o por azares de la vida, están de nuevo en la muerte de uno de ellos. Sin duda las siete expresiones de Jesús en la cruz son un gran legado espiritual para nosotros, que deseamos querer mucho más y mejor a Jesús.
Vida Religiosa es una gaceta por mes y además cinco números monográficos sobre teología y actualidad de la vida religiosa. Te suplico que muevas mi alma y mi corazón a pensar a menudo, cuando menos una vez cada día, en Tu amarguísima Agonía en el Huerto de Getsemaní, para comunicarme contigo y unirme a Ti lo mucho más íntimamente posible. Acércanos a la Palabra de Dios, para aprender a comprender la sabiduría de sus palabras. Continuar con fe las enseñanzas por medio de la palabra de Dios.
Le ha dicho su Padre que anunciase a los hombres la pobreza, y nació en Belén, pobre. Le mencionó que anunciara el trabajo y vivió treinta años trabajando en Nazaret. Estas fueron las últimas palabras pronunciadas por Jesús en la Cruz. “La sed del cuerpo, con ser grande -afirmaba Santa Catalina de Siena- es limitada.
Asiste a los que se dedican al precaución de los enfermos. (Si el enfermo puede confesarse, es recomendable que lo haga en este momento. Hermanos, para participar con fruto en esta celebración, empecemos por admitir nuestros pecados.
“Me dejareis solo”, había dicho Jesús a sus discípulos. Y en este momento está solo, entre el Cielo y la tierra. Almacena mi nombre, correo electrónico y web en este navegador para la próxima vez que comente. Hazle entender que en el Suplicio tu hijo pagó por nuestros errores y que sus errores han sido enmendados por los siglos de los siglos. Ayudarlo a aceptar la muerte como un obsequio prodigioso del Señor. Ofrecer toda la atención a quien sufre en la cama, en tanto que es probable que en el momento se sienta enclenque o con mal.
Hemos sido creados para vivir en comunión con él. Que el sufrimiento termine y vaya a tu reino donde ya no va a haber mal, no va a haber tristeza. Haz de mí tu instrumento para hacerle entender tu palabra, Señor. Lléname de sabiduría para transmitirle la fe en tu promesa eterna.