Esta cifra se disminuye en un 46,5% en el caso de mujeres de entre 60 y 69 años, y en un 33% si la mujer ahora tiene mucho más de 70 años. Mucho más adelante, a pesar de que hay mujeres que se masturban mucho más que los hombres, en general, son estos últimos los que lo hacen con mayor frecuencia. Naturalmente, asimismo hay mujeres que deciden no hacerlo y otras que empiezan a masturbarse en el momento en que ya son adultas. El mayor interés de los niños, y menor de las niñas, en examinar su cuerpo se debe, en realidad, a la diferencia anatómica.
Muchas son las mujeres que utilizan un vibrador, o incluso dos, para masturbarse. Actualmente, los logramos hallar de múltiples formas y tamaños. Aun, con un poco de imaginación, podemos llevar a cabo uno casero, si bien siempre es menos higiénico. Por ejemplo, utilizando un cepillo de dientes eléctrico, siempre de forma externa y cubriendo el cepillo con algún material delicado, como un preservativo. Una de las técnicas mucho más fáciles para masturbarse radica en utilizar un elemento, como una almohada o una toalla enrollada, para simular que contamos relaciones íntimas.
Movimientos Circulares
Tú misma vas a sentir exactamente en qué posición precisa te resulta más placentero y es mejor que prosigas las sensaciones de tu cuerpo, de este modo vas a tener el orgasmo asegurado. De nuevo, échate sobre tu espalda, pero en esta ocasión dobla las rodillas, elevándolas hacia tu pecho, y también introduce un dedo o 2 en tu vagina, moviéndolo de arriba abajo, es decir, doblándolo y estirándolo. De esta manera, estimularás el punto G más de forma fácil y apreciarás considerablemente más exitación que si simulas una penetración simple. En esta postura asimismo puedes abrir o cerrar más las piernas, según sientas que te resulta más placentero. Para guiarte a sostener esta situación, prueba a colocar una almohada bajo tu cadera, ya que te va a ayudar a tener las piernas elevadas de manera mucho más cómoda.
Introduce de forma cuidadosa uno o 2 dedos en la vagina, con la ayuda de lubricante. Puedes realizar movimientos de penetración, al ritmo que te guste, o puedes curvar los dedos hacia arriba y alentar la parte interna del clítoris. Con el paso de los años las mujeres han dejado atrás sus complejos, miedos y vergüenzas para actualizarse, y tener la misma libertad, o incluso mucho más, que el sexo masculino. La masturbación femenina siempre fué un tema tabú entre las mujeres, a la inversa que la masculina, de la que charlan sin problema, e inclusive, alardeando.
Las Manos, Tus Mejores Aliadas
El movimiento puede ser de arriba hacia abajo, o de lado a lado. Asimismo se puede estimular solo el clítoris o ampliar la zona y que la caricia sea mucho más larga. Los movimientos pueden ser veloces o bien más pausados, más directos e intensos o bien mucho más suaves. El sexo no tiene por qué ponerse un límite a los instantes de intimidad con tu pareja. Examinar tu cuerpo te ayudará a conocerlo mejor y te dejará disfrutar mucho más aún del sexo en pareja. Si padeces anorgasmia, la masturbación te puede contribuir a superarla por el hecho de que te va a ayudar a conocerte mejor, conocerás sola el orgasmo y terminarás sabiendo lo que enserio te hace placer.
No pienses que es llegar, tocarte y tener un orgasmo monumental. Al igual que con una relación íntima compartida, es esencial dar importancia a los detalles. Cultivar tu deseo e irlo creciendo poco a poco es el primer paso. Con los dedos pulgar e índice o corazón y anular coge su clítoris y muévelo de arriba-abajo o realizando rotaciones. De qué forma ahora hemos dicho antes, esto son solo algunas ideas y técnicas que puedes proseguir, pero ten en cabeza que no estamos siguiendo una receta de cocina. No hay ninguna técnica eficaz sobre de qué forma masturbar a una mujer o personas con vulva.
Esto asimismo puede contribuir a prosperar tu vida sexual si tienes pareja. Vas a recibir la gaceta “Mi bebé y yo” y las newsletters de tu embarazo y desarrollo de tu bebé completamente gratis. DIRECTORA EDITORIAL MI BEBÉ Y YO. Experta en temas de embarazo, maternidad y paternidad, bebés y niños, y organizadora de nuestra Agenda de Desarrollo. Por este motivo, el ambiente ha de ser relajado, con una música y temperatura correctas.
Con una mano puedes acariciar tu clítoris mientras con la otra estimulas tu vagina. Prueba abriendo bien las piernas y después cerrándolas para hacer más fricción en el área. A fin de que te resulte mucho más fácil y placentero, sube y baja tu cadera al ritmo que sientas conveniente, apoyando bien los pies. ¡Déjate llevar y aplica la imaginación para tocarte como mucho más reconfortante te resulte! Si lubricas poco, puede ser que la vagina esté algo seca y no facilite la penetración de los dedos.
Cuando estés cerca del orgasmo, puedes seguir presionando con la palma de la mano y utilizar las puntas de los dedos para tocar el glande del clítoris de forma mucho más directa. Para esta técnica deseamos tocar el clítoris con la yema de uno o 2 dedos, haciendo movimientos lineares. Estos tienen la posibilidad de ser de arriba abajo, al reves, o de forma del costado (¡a gusto del cliente!), aplicando un ritmo y velocidad cambiantes para ir acrecentando de a poco el placer. Siéntate en una silla o sillón que te resulte cómodo, mejor si tiene braceras, y abre las piernas para tener simple acceso a tu vagina.
El Clítoris Es La Última Parada
Nuevamente, con una mano puedes estimular la vagina al paso que con la otra acaricias tu clítoris. Puedes abrir bien las piernas, cerrarlas para tener mayor roce y presión o puedes subir las piernas, apoyándolas en las braceras si quieres. Si quieres saber de qué manera masturbarse siendo mujer y sentir el máximo placer, anota las siguientes ideas, pruébalas y revela cuáles son las mejores para ti.
Hay mujeres en verdad que alcanzan alcanzar el clímax solo con la estimulación de los pezones, puesto que es una zona con una alta concentración de terminaciones nerviosas y tienen la posibilidad de generar bastante placer. Y si el orgasmo no llega no pasa nada porque no precisas lograr el clímax para gozar al máximo. En el sexo lo más esencial habría de ser el sendero y no el destino final, ese ansiado orgasmo. Puedes utilizar solo el dedo corazón o aun dos dedos, y combinar los movimientos circulares con movimientos a los lados que aumenten la agilidad y la presión. Marca tu propio ritmo y céntrate en las sensaciones que se producen.
Una de las primeras y mejores formas de empezar a conocer cómo masturbarse como mujer es examinar tu cuerpo. Tócate los pezones, el clítoris, el área alrededor del ano, todo lo que quieras. Ponte un poco de lubricante en el dedo índice o medio, quita poco a poco el capuchón y acaríciate. Explora y prueba con diferentes velocidades, grados de presión y puntos de exitación. Mueve tus dedos de arriba a abajo, de izquierda a derecha y con apariencia de círculo. En el momento en que ubiques el punto de mayor exitación, quédate ahí; respira de forma natural, eso es muy importante.